Les agradezco tanto que sintieran mi ausencia que no se si mi justificación les va a ofender. Estoy un tanto PUFFFFFFFFFF. Y puffff traducido es cansado mental, física y sentimentalmente. Supongo que era algo que me tenía que pasar desde que la ausencia de Lucía empezara a hacer mella en mí. He disfrutado mucho de ella en verano, pero, en cuestión de mi hija nunca es suficiente tiempo. El momento en que se va es como si me arrancaran el alma del cuerpo.Por otro lado aprovecho los momentos de soledad, descanso y relax. Para leer libros que tenía pendientes y que se convertían en una gran montaña amenazando con derrumbarse sobre mi cabeza, releer libros como "Cien años de soledad", "El Principito", "Razón de amor" etc... y disfrutar de mucho cine y dvd. He redescubierto el placer de verme un buen Dvd comiéndome un helado y de ir al cine con unas chuches. He visto mucho cine argentino y si no la han visto cosa que dudo (Efrén), El ultimátum de Bourne, impresionante película de acción.
Gracias por tu sms Efrén, te tengo presente y tengo muchas ganas de verte. Tu blog me hace tenerte cerca hermano. Siento que las circunstacias nos separen físicamente. Te quiero y lo sabes. Entre nosotros la distancia sólo es distancia. Nuestro mutuo amor y respeto es más fuerte que eso.
Ana visito a diario tu blog como lo hacía antigüamente, como un fantasma que rrecorre tu casa, disfrutando tu prosa y tu poesía. Echo de menos nuestras charlas.
Claudia, mi entrañable amiga cibernética. A quién le descubro en cada conversación lo gran mujer que es. Solventamos la distancia con unos cafés virtuales, en los que destripamos lo mejor y peor de la vida.
Les regalo esta foto de Mi Rincón. Aquí me bajo del mundo. No les diré dónde está porque luego tendría que matarlos (jajajaja).
Y les dejo un fragmento de una película que les recomiendo.
Besos y espero seguir con fuerzas.
"Úntame de amor y de otras fragancias de tu jardín secreto. Sácame de quicio, hazme sufrir... Ponme a secar como un trapo mojado. Lléname de vida, líbrame de mi estigma. Llámame tonto. Olvida todo lo que haya podido decirte hasta ahora. No me arrastres, no me asustes. Vete lejos...pero no sueltes mi mano. Empecemos de nuevo. Toca mis ojos, nota la textura del calor. ¿Por cuánto te vendes? Píllate los dedos y deja que te invite a un café. Caliente claro. Y sin azúcar... sin aliento".
Unax Ugalde en "Báilame el agua"